Crisis de pánico, la mente que escapa de sí misma...
Qué es una crisis de pánico
"Me siento en un gran peligro, creo que puedo morir en cualquier momento"
"Es un terror súbito, sin causa ni previo aviso, al que no encuentro explicación"
"Me siento en un gran peligro, creo que puedo morir en cualquier momento"
"Es un terror súbito, sin causa ni previo aviso, al que no encuentro explicación"
"De pronto, tengo tanto miedo que casi no puedo respirar y no sé que temo...sólo quiero escapar, pero no sé de que."
" Me siento tan rara, parece que mi cuerpo no fuera mío. Todo se aleja, no sé donde quedé yo"
"Me siento encerrada dentro de mi misma y hay algo allí que me da miedo"
Todas estas palabras sólo pueden ser bien comprendidas por alguien que haya sufrido esta experiencia. Provocan un gran sufrimiento, el miedo que se siente es urgente, enloquecedor. En la persona hay una fuerte sensación de que en cualquier momento, el resto de razón que va quedando escapará y caerá en un estado que es como un pozo sin fondo, sobreviene una especie de vértigo.
Hay una sensación de peligro inminente, la persona se enfoca sólo en huir pero no sabe hacia donde hacerlo, lo que teme está dentro de si misma. Hay un desconocimiento de que es lo que provoca tanto temor, impidiendo que pueda tomar medidas defensivas, algo que aumenta enormemente la sensación de pánico. A veces la persona teme enloquecer, otras teme morir, en casi todos los casos teme por su corazón, que acelera tanto sus latidos debido a la fuerte sensación de miedo.
Se agrega a lo anterior el no poder explicar a su familia, a los que la estiman que es lo que le sucede. Siente que, sin un motivo válido, les está causando pena, dolor, en ocasiones hasta aburrimiento y rabia por la no comprensión de que está sucediendo.. Debería poder controlarse y no lo logra, se siente débil y disminuida frente a los demás.
Poco a poco comienza a limitar sus actividades, a reducir su autonomía, por temor a la repetición de los episodios de pánico.
Síntomas
Durante el ataque de pánico se producen síntomas físicos y mentales muy intensos:
- Pupilas agrandadas para mejorar la visión
- Oído se agudiza
- Músculos se tensan para responder al desafío
- Frecuencias cardíaca y respiratoria aumentan
- Sangre es dirigida a áreas prioritarias: corazón, pulmones, riñoñes, hígado, músculos grandes y cerebro
- Funciones no prioritarias en ese momento, como la inmunitaria, digestión y circulación periférica son disminuidas en forma dramática
- Dificultad para respirar
- Dolor, opresión o malestar en el pecho
- Temblores o mareos
- Ansiedad y excitación fisiológica Hipertensión arterial
- Sentir que uno mismo y lo que me rodea, no son reales
- Sensación de atragantarse
- Miedo a perder el control o a perder la razón
- Miedo a morir
- Parestesias (sensación de entumecimiento u hormigueo)
- Calor o frío
- Sequedad en la boca y en el paladar
- Sensibilidad a la luz
Estos episodios de miedo extremo, o crisis de pánico, aparecen de forma repentina e inesperada. Suelen presentarse luego de períodos prolongados de stress Son una respuesta del organismo frente a la percepción de un peligro no posible de identificar, tal vez un recuerdo de alguna situación pasada que la persona no logró manejar y ese recuerdo se activa por algún factor que lo desencadena.
Aparecen cambios fisiológicos en forma inmediata desencadenando muchos de los síntomas descritos anteriormente incrementando la sensación de descontrol.
Tratamiento
En Maitri hemos obtenido muy buenos resultados en la recuperación de las crisis de pánico. Habitualmente luego de 3 -5 sesiones ceden, manteniéndose sólo una sensación de ansiedad que, con tratamientos más prolongados, las personas aprenden a manejar. En la mayoría de los casos que hemos tratado, no se han producido recaídas. Atribuimos esto, en gran parte, al trabajo conjunto que hacemos con el paciente, buscando un cambio en su mente mediante variadas técnicas.
Creemos que en la base de esta enfermedad hay un desequilibrio energético muy importante que poco a poco va minando cuerpo y mente, dejándolos en un estado de debilidad grande. Finalmente esta situación desemboca en la crisis de pánico. Detrás de ese desequilibrio de la energía, del porque se produce, hay factores mentales involucrados como no aceptación de aspectos de nuestra personalidad o sensación de incapacidad para responder en forma adecuada a las exigencias que percibimos del entorno.
El tratamiento incluye sesiones de acupuntura, reiki, alineación energética, terapia floral, trabajo con tarot Osho usado en forma terapéutica y aprendizaje de técnicas de respiración y relajación.